Aunque la domesticación del fuego por los seres humanos comenzó hace unos 500.000 años, no fue hasta el paleolítico superior, hace unos 30.000 años, cuando comenzó a utilizarse para fabricar recipientes y figurillas de barro, dando inicio a la alfarería y la cerámica.
El arte y técnica de la alfarería y de la cerámica fue pasando de generación en generación, cobrando su mayor importancia a partir de la sedentarización de las poblaciones durante el Neolítico, hace unos 7.000 años, cuando la necesidad de recipientes de barro se hizo más acuciante.
La artesanía de cerámica se hizo indispensable para cocinar y almacenar alimentos o bebidas como la leche, la cerveza o el vino.Su importancia sigue siendo capital a día de hoy.
Utensilios de cerámica de barro más usados en las cocinas
Aunque se trate de un material relativamente frágil, la cerámica es un material excelente para ser utilizado en la cocina ya que ofrece una gran resistencia a las altas temperaturas. A continuación te mostramos algunos de los más utilizados.
- Arcilla común: conocidos popularmente como loza, son muy utilizados como fuentes, vajillas, bandejas, etc.
- Cerámica blanda: también conocida como porcelana blanda, es muy utilizada en platos, vasos y vajillas. Soporta muy bien el lavado en lavavajillas y el calentamiento en el microondas, aunque no es apta para el horno o el fuego directo.
- Cerámica dura: con una gran resistencia térmica, química y mecánica y su impermeabilidad la hace ideal como material de cazos, cazuelas y ollas. Soporta perfectamente el contacto directo con el fuego.
- Cerámica avanzada: existen materiales cerámicos como la zirconia o el nitruro de silicio con una gran estabilidad y dureza que los hacen idóneos para la fabricación de cuchillos, con unas hojas que se mantienen afiladas más tiempo que las de acero.
- Antiadherente cerámico: es el material con el que se recubren las conocidas como sartenes de cerámica, que en realidad son de acero o aluminio. Su perfecta antiadherencia las hace cada vez más populares para su uso en las cocinas.
Beneficios de cocinar en pucheros u ollas de barro
No es casualidad que el uso de cerámica y recipientes de barro en la cocina tenga una tradición milenaria. A pesar de existir materiales más modernos, el barro sigue presentando una serie de ventajas que lo convierte en favorito para trabajar entre fogones.
En primer lugar, los alimentos cocinados en ollas o pucheros de barro se cuecen mejor ya que la porosidad del material deja pasar la humedad necesaria. Por otro lado, los alimentos no se pegan y la comida se mantiene caliente por más tiempo que con otros materiales por transmitir el calor poco a poco.
Los recipientes de barro se pueden utilizar en el horno, en el microondas e incluso en placas de vitrocerámica o inducción a poca potencia. Son perfectos para elaborar recetas tradicionales que requieren un cocinado lento. El resultado son unos platos con un sabor excepcional.
Como los objetos artesanales que son, las ollas, pucheros y cazuelas de barro deben ser tratadas con delicadeza, ya que son frágiles y pesadas y pueden romperse al manipularlas, pero bien merece la pena contar con ellos en la cocina por su excelente precio y sus maravillosos resultados gastronómicos.
Elementos decorativos de menaje realizados con barro
La funcionalidad no es la única ventaja del menaje de barro. Desde el punto de vista estético siempre es un placer contar con estos objetos de artesanía.
Entre los elementos decorativos de menaje más populares destacan los juegos de ponche o sangría, perfectos para servir bebidas a la hora del aperitivo en reuniones con familia o amigos. Tampoco pueden faltar juegos de sal y pimienta, que pueden colocarse en el centro de la mesa para aliñar los platos creando una agradable estética rústica.
Otros elementos de barro funcionales y decorativos son, entre muchos otros, las tarrinas para paté, perfectas para poner en la mesa en la mesa con los entrantes, o los palilleros, tan útiles al final de las comidas.
Durante miles de años el menaje de cerámica y barro nos ha acompañado en la cocina, y todo parece indicar que lo seguirá haciendo durante unos cuantos miles de años más. Su funcionalidad y estética son una combinación irresistible.
